miércoles
diciembre, 17

Escándalo en el Senado: Gritos, Impugnaciones y el Amago Judicial por la Reforma Laboral

El inicio del tratamiento de la reforma laboral en la Cámara Alta se transformó en un campo de batalla reglamentario y político. Con la institucionalidad al límite, el kirchnerismo desconoció la autoridad de las comisiones mientras el oficialismo forzó su puesta en marcha en un clima de extrema hostilidad.

La discusión de la reforma laboral en el Senado no comenzó con el análisis de sus artículos, sino con una explosión de violencia verbal y técnica. El bloque kirchnerista, ahora bajo el sello de “Interbloque Popular”, lanzó una ofensiva total contra la constitución de las comisiones de Trabajo y de Presupuesto y Hacienda. Los argumentos se centraron en una supuesta ilegalidad reglamentaria: aseguran que la integración de estos cuerpos carece de validez porque las facultades delegadas en el pasado han caducado tras el recambio legislativo del 10 de diciembre.

El epicentro del conflicto ocurrió en la mesa de la Comisión de Trabajo. Allí, José Mayans y Patricia Bullrich protagonizaron un duelo de voluntades que terminó en un desborde de gritos y descalificaciones. Mientras Mayans denunciaba un “atropello” y cuestionaba la facultad de la vicepresidenta Victoria Villarruel para designar miembros, la senadora libertaria mantenía la frialdad para avanzar con su nombramiento como presidenta de la comisión. La escena, marcada por frases fuera de micrófono y un enojo visceral, dejó en claro que el diálogo parlamentario está roto antes de empezar.

Pese a la resistencia y las impugnaciones, el oficialismo logró ratificar a sus autoridades —Bullrich en Trabajo y Ezequiel Atauche en Presupuesto— gracias al apoyo de los sectores no kirchneristas. La estrategia gubernamental es clara: avanzar con el cronograma previsto y convocar de inmediato a los funcionarios del Ejecutivo para defender el proyecto, ignorando las advertencias de judicialización que ya resuenan en los pasillos del Congreso.

Puntos Clave de la Crisis Legislativa:

  • Amenaza Judicial: El kirchnerismo impugnó formalmente la composición de las comisiones alegando la violación del artículo 14 del Reglamento del Senado, advirtiendo que el debate terminará en los tribunales si se persiste en lo que consideran un “vicio de origen”.
  • Desconocimiento de Autoridades: José Mayans sostuvo que la resolución de bloques que sustenta las designaciones actuales es inválida, calificando la situación como un intento de avanzar con senadores y estructuras que ya no tienen vigencia legal tras la última elección.
  • Avanzada Libertaria: Patricia Bullrich asumió la presidencia de la Comisión de Trabajo en medio de un clima de máxima tensión, dejando vacantes cinco lugares destinados al kirchnerismo y convocando de inmediato a los secretarios de Estado para iniciar la defensa técnica de la reforma.
  • Tensión en el Recinto: El nivel de confrontación —que incluyó gritos de Mayans a Bullrich en la mesa cabecera— anticipa un trámite parlamentario sumamente complejo, donde la validez de la ley podría quedar bajo la lupa de la Corte Suprema antes de ser sancionada.
spot_img