El Presidente Javier Milei arremete contra sus opositores en una entrevista internacional, acusándolos de una estrategia de “todo o nada” para desestabilizar su gobierno. Milei afirma que sus adversarios están dispuestos a “quemar las naves” y recurrir a tácticas extremas, incluyendo la violencia y la difamación, para frenar su programa económico.
En un fragmento de una entrevista que ha generado gran revuelo, el presidente Javier Milei expone lo que considera una batalla a vida o muerte con la oposición. Sentado en un sillón, con subtítulos en francés, el mandatario describe la estrategia del kirchnerismo y sus aliados como la de “quemar las naves”, una táctica que, según él, implica un enfoque de “es todo o nada”.
Según Milei, esta ofensiva se manifiesta en múltiples frentes. Por un lado, intentan “destruir el programa económico desde el Congreso de la Nación”. Por otro, señala la existencia de “manifestaciones violentas en la calle”. En un momento particularmente tenso, eleva la gravedad de sus acusaciones al sugerir que las acciones de sus opositores buscan “o intentar matarme”, aunque luego matiza que se trata de “inventar mentiras” y “tratar de desprestigiarme”. Las imágenes del video refuerzan su relato al mostrar a manifestantes portando un ataúd de cartón con su rostro, una simbología que él interpreta como una muestra de la hostilidad en su contra.
El presidente concluye con un tono de victoria inminente, calificando a la oposición como los “últimos manotazos de ahogado de un régimen“. En un desafío directo, asegura que, si “Dios nos acompaña”, lo terminarán de “sepultar” el 26 de octubre, fecha que parece ser una referencia metafórica al próximo calendario electoral, y que el régimen podría quedar “herido de muerte casi definitiva”.
