El discurso de Javier Milei y la primera lectura del proyecto de ley causaron malestar en las provincias. Aliados y opositores criticaron al Gobierno, mientras analizan la letra chica del texto. Casa Rosada inicia diálogo para desactivar reclamos.
La presentación del proyecto de ley del Presupuesto 2025 y el pedido de un ajuste de u$s60 mil millones por parte de Javier Milei a las provincias encendió las alarmas entre los gobernadores, que ya deslizaron su malestar con la Casa Rosada, al tiempo que estudian junto a sus equipos la letra chica del texto.
Si bien la nueva hoja de ruta planteada por el Presidente proyecta que las provincias y la Ciudad de Buenos Aires perciban el 8% del PBI, lo cierto es que el reclamo de mayor motosierra sobre las arcas provinciales puso en alerta a las administraciones subnacionales, que se alistan para dar la batalla legislativa.
Rechazo de Buenos Aires y Santa Fe al ajuste pedido por Javier Milei
La gestión bonaerense de Axel Kicillof fue una de las primeras en manifestar su preocupación. Este lunes, en la habitual conferencia de prensa, el ministro de Gobierno Carlos “Carli” Bianco anticipó que la Provincia de Buenos Aires ya trabaja en su propio Presupuesto y que, a diferencia del presentado por Milei, “no será un presupuesto de ajuste”.
Al respecto, el funcionario rechazó el pedido del mandatario de “ponerle un cepo al Estado”. “Desde la Provincia le decimos a Milei que no vamos a hacer ese ajuste; que no vamos a participar de ese ajuste, porque creemos lo contrario. No es una cuestión ideológica: yo viajo mucho por el interior, lo acompaño mucho al gobernador, y la gente no nos pide que le pongamos un cepo al Estado. Adónde vas te piden más patrulleros. ¿Qué son los patrulleros? El Estado. Adonde vas te piden más medicamentos, más insumos, más hospitales. ¿Qué es eso? El Estado”, disparó.
En esa tónica, la administración bonaerense señaló que el ajuste no es lo que necesita la Provincia de Buenos Aires y que el gobernador, en su segundo mandato, fue elegido para fortalecer el Estado y asegurar más derechos a la población. Denunciaron, además, que el Gobierno nacional “va a estar reduciendo más de 5 puntos del PBI en materia de un ajuste es totalmente inútil e innecesario”.
“Ese ajuste se ve cotidianamente cuando la gente no tiene para llegar a fin de mes, cuando se para la obra pública y quedan esas cáscaras totalmente vacías. En la Provincia hay casi 1.000 obras paradas. Ahora quieren que nosotros emulemos esa política. Veamos los resultados que tuvieron a nivel nacional por llevar adelante ese ajuste brutal, el más grande la historia de la humanidad. Más de 200 mil nuevos desempleados. Gran parte de esos desempleados”, protestaron.
Por último, desde La Plata señalaron que La Libertad Avanza (LLA) “ni siquiera puede sostener en la práctica cotidiana de la gestión”. “Todo el tiempo dan a entender que no se va hacia una devaluación porque eso generaría inflación, entonces no es un fenómeno puramente monetario. En Argentina la principal variable que influye en la inflación es el tipo de cambio. No es un fenómeno puramente monetario, sino que también tiene que ver con la disponibilidad de reservas”, cerraron.
Otro distrito que alzó la voz fue Santa Fe. Este lunes, en rueda de prensa, el gobernador Maximiliano Pullaro comentó que “preocupa un poco que se le siga pidiendo esfuerzo a las provincias”. Destacó, además, que su provincia “fue una de las que más esfuerzo hicieron en lo que va del año para lograr tener una eficiencia en el manejo de los recursos públicos, para lograr tener un equilibrio fiscal”.
En este sentido, Pullaro recordó que su gestión inició “con un déficit fiscal muy importante, que nos afectaba en este año en tres masas salariales, y tuvimos un recorte muy importante del Gobierno nacional que nos impactó en una masa salarial más. Sin embargo, reduciendo primero el gasto político, los cargos, por un lado; y, por otro lado, trabajando mucho la eficiencia en el manejo de los recursos públicos, pudimos en los primeros seis meses mostrar un pequeño superávit fiscal. Hicimos todos los esfuerzos que teníamos que hacer y hasta hicimos un esfuerzo mucho mayor al que hizo el gobierno nacional”.
Por otra parte, insistió con sus reclamos por la deuda de entre $700 mil millones y $800 mil millones que Nación mantiene con Santa Fe: “Nosotros no pretendemos que nos den nada por encima de la ley, pero tampoco nada por debajo de la ley. Más esfuerzo no se puede hacer. No corresponde que nosotros hagamos más esfuerzo porque a Nación no le debemos nada, y Nación nos debe mucho a la provincia de Santa Fe, y nosotros vamos a continuar con mucho respeto, pero con mucha firmeza, el reclamo ante la Corte Suprema de Justicia de Nación”.
Y concluyó: “Santa Fe no va a ser un aporte más grande al Estado nacional, porque le aporta tres veces y media más de lo que vuelve del Estado nacional a la Provincia”.
Alerta en el Norte Grande: “Lo único que hicimos desde enero es atajar penales”
Entre los gobernadores del Norte Grande cayó como un baldazo de agua fría el pedido de ajuste del presidente Milei, debido al escenario que ya atraviesan por el desfinanciamiento de las obras públicas, los fondos para educación, transporte público, salud y asistencia social. “Lo único que hicimos desde enero es atajar penales, cubrir los baches que dejó la Nación y que afectan a todos, en especial, a los que menos tienen. Ahora nos piden más pero ya no hay margen”, se sinceró ante Ámbito un funcionario del gobierno provincial de Catamarca, cuyo gobernador, Raúl Jalil, es uno de los considerados dialoguistas.
Esta provincia, a diferencia de otras del norte, es una de las que más inversiones en actividad minera registró en los últimos meses, salvavidas que le garantizó ingresos con los que puede “tapar los agujeros” que generaron los recortes de la Nación. “Es imposible que estos fondos reemplacen a los de Nación, por lo que el reclamo continuará”, anticipó la fuente. En diciembre del año pasado, Jalil activó su propio ajuste con una reducción de la planta política del Poder Ejecutivo en un 20%, entre otras medidas.
El senador nacional peronista catamarqueño Guillermo Andrada, de estrecha relación con Jalil, informó este lunes en una entrevista que hubo una reunión de diputados y senadores nacionales, tras el discurso de Milei. “El gobernador nos pidió que lo veamos minuciosamente, peleemos por lo que le corresponde a Catamarca y en base a esto aprobemos”, expresó. “El panorama es bastante crítico porque es difícil entrar en un ajuste de este tipo, las provincias ya no tienen posibilidades de ajuste como pide Milei”, cerró.
Desde Salta, Roberto Dib Ashur, ministro de Economía del gabinete del gobernador Gustavo Sáenz, que también integra el bloque dialoguista, señaló en una entrevista que, aunque coincide con la importancia del equilibrio fiscal, aclaró que “no comparte el enfoque para alcanzarlo”. Puso el acento en que el mercado no puede cubrir todas necesidades, como las obras de infraestructura en zonas remotas y puso como ejemplo la construcción del dique El Limón, ubicado en el departamento San Martín que beneficiará a 100.000 personas, que requirió una fuerte inversión estatal de $2.605 millones para proveer de agua en el norte, una zona en donde la sequía hay habituales sequías.
Dib Ashur cuestionó la decisión de la Nación de retirarse de áreas clave como vivienda y transporte, trasladando la carga financiera a las provincias y anticipó medidas. “La discusión se planteará a nivel del Congreso sobre qué se hará con los impuestos destinados a fondos específicos”, sostuvo. Recordó que Salta ya implementó una ley de emergencia económica para controlar el gasto, continuar con obras públicas y apoyar áreas clave.
En Tucumán también era inocultable el malestar por el pedido de la Casa Rosada de más ajuste. Una fuente señaló que es imposible porque el gobernador Osvaldo Jaldo ya lo hizo apenas asumió, cuando aplicó un fuerte recorte de $220.000 millones en el Presupuesto provincial 2024 y la reducción de 1.400 puestos de la planta política, entre otras medidas. El tucumano fue uno de los primeros en alinearse detrás de la gestión nacional, tendió puentes de diálogo, armó su propio bloque de diputados nacionales (Bloque Independencia) para apoyar al oficialismo en el Congreso pero también padece el giro de partidas en cuentagotas.
Hace menos de un mes, antes de ser eyectado de su cargo como ministro de Obras y Servicios Públicos de Tucumán, Santiago Yanotti, reveló que la Nación acordó el envío de $93.000 millones para el reinicio de obras públicas de distintas dimensiones pero “a la provincia llegaron menos de $1.000 millones hasta el momento”.
Desde entonces, pese al cambio de nombres, la mora continúa, se indicó. Por el momento, el gobernador Jaldo se excusó de opinar debido a que este domingo murió en un accidente el intendente peronista de la ciudad de La Cocha, Leopoldo Rodríguez, y el mandatario estuvo durante la mañana en ese municipio. Jaldo y Rodríguez tenían una relación cercana porque comenzaron en la política en 1983 y seguían en funciones. “Ahora dependerá de lo que pase en el Congreso”, señaló la fuente consultada.
Ámbito supo que durante las primeras horas de mañana hubo mensajes entre algunos gobernadores, en donde prevaleció un clima entre sorpresa y malestar por el pedido de profundizar el ajuste. El contacto se produjo entre los mandatarios dialoguistas norteños y se esperaba que el diálogo incluya en las próximas horas a los más críticos de la gestión de Milei, como Gildo Insfrán (Formosa), Gerardo Zamora (Santiago del Estero) y Ricardo Quintela (La Rioja), que el próximo viernes visitará Tucumán en su gira de sumar adhesiones para presidir el PJ nacional.
La semana pasada, como lo contó este medio, durante la 52° Plenario del Parlamento del Norte Grande, en Misiones, se emitió un documento entre los 10 vicegobernadores que expresó: “Reclamamos enfáticamente al Poder Ejecutivo Nacional que el Presupuesto Nacional 2025 contemple e incluya las partidas necesarias para la concreción de las obras de infraestructura prioritarias”. El documento fue firmado por todos los vicegobernadores de La Rioja, Salta, Santiago del Estero, Jujuy, Catamarca, Tucumán, Misiones, Chaco, Corrientes y Formosa.
Otro de los mandatarios de la región que opinó sobre el Presupuesto 2025 fue el correntino Gustavo Valdés. En principio, el dirigente radical remarcó que, por el momento, no cuenta con los números y consideró que el del Presidente fue un “discurso político”. “El debate se dará en el marco del Congreso una vez que se conozcan los números”, amplió, al tiempo que comentó que “el envío de recursos de Nación a las provincias bajó casi un 15% el último mes aproximadamente”.
Aclaró, sin embargo, que “esto no afecta en nada a la política salarial, porque los salarios de los trabajadores del Estado están garantizados”. A la par, anticipó que Corrientes “tiene espalda para seguir creciendo”. “Vamos a mirar qué es lo que mandan en el presupuesto. Hasta ahora vimos un discurso político y no los números. Cuando uno dice un presupuesto, no es un discurso sino números”, detalló.
Cautela por letra chica y frentes abiertos
Siguiendo esa senda, un diputado dialoguista de una importante provincia evaluó en diálogo con Ámbito el Presupuesto 2025 y el énfasis en el ajuste a los distritos. “Personalmente creo que es un buscapié para los gobernadores. Pide un ajuste por u$s60 mil millones cuando el presupuesto de todas las provincias juntas no llega a ese número”, comentó. “Los gobernadores lo tomaron mal, pero sin enojarse. El que se enoja con este Gobierno pierde”, sumaron desde la órbita de un jefe provincial de Juntos por el Cambio (JxC).
Si bien en las filas amarillas manifestaron su acuerdo con los principales lineamientos del proyecto, no ocultaron su malestar por el mayor ajuste en las arcas provinciales. En la Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, advirtieron que el texto no contempla el fallo de la Corte Suprema que ordenó devolverle el 2,95% de la Coparticipación Federal. “Nosotros ya tenemos déficit cero, la cuestión es cumplir con el fallo de la Corte”, señalaron. Con ese norte, este miércoles habrá una nueva audiencia entre Jorge Macri y el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, para llegar a un acuerdo.
Desde una provincia patagónica consultada por este medio, señalaron: “La regla del Presupuesto Nacional de acá en adelante es una regla simple: quien quiera aumentar un gasto tiene que decir qué otro gasto va a disminuir; de esa manera, proyecta siempre tener déficit cero”. La fuente evaluó que, de acuerdo al proyecto, teniendo un presupuesto equilibrado o superavitario, baja la inflación, aumenta la productividad, aumenta la inversión y el país progresa. “Todos estos efectos esperados, vimos que, este año al menos, no se han cumplido en la práctica”, dijo.
Hizo ruido, además, que Javier Milei no se refiriera al futuro de las principales variables de la economía durante su discurso en el Congreso. “Llamó mucho la atención que en la presentación del Presupuesto no se hable del Presupuesto. No se exponga el crecimiento del PBI, que no se hable de Inflación, de la situación comercial, industrial y productiva de la Argentina, del tipo de cambio, de los jubilados, trabajadores, universidades, de lo que va a suceder con el costo de los servicios”, comentó un funcionario provincial.
Este lunes, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, encabezará un Zoom con gobernadores de todo el país con el objetivo de aclarar dudas y comenzar a recibir la devolución por parte de las provincias.