En una jugada que sacude al oficialismo, seis diputados que llegaron al Congreso de la mano de Javier Milei acaban de formalizar su ruptura total con la Casa Rosada. Lejos de la retórica de la “lealtad”, estos exintegrantes de La Libertad Avanza conformaron un nuevo interbloque opositor llamado “Desarrollo y Coherencia”, declarándole la guerra al Presidente y al titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
La decisión, que se venía gestando hace meses en medio de internas explosivas, es un golpe directo al corazón del poder libertario. Los diputados Oscar Zago, Marcela Pagano, Carlos D’Alessandro, Lourdes Arrieta, Gerardo González y Eduardo Falcone firmaron la nota que oficializa su separación, un quiebre que reduce la fuerza del oficialismo y fortalece a la oposición.
El Bloque de los “Desilusionados”
La nota es la culminación de un largo proceso de desencuentros que inició casi con el mandato de Milei. La salida de Oscar Zago de la presidencia del bloque, el escándalo de la diputada Lourdes Arrieta en la cárcel de Ezeiza, los roces por alianzas electorales con Carlos D’Alessandro y la batalla de Marcela Pagano por presidir la Comisión de Juicio Político—un enfrentamiento abierto con Martín Menem— son solo algunos de los capítulos de esta saga de traiciones y disputas.
Según fuentes del nuevo interbloque, su intención es clara: seguir sumando a otros diputados que, como ellos, se sienten “defraudados” por el Gobierno. “Hay conversaciones con otros legisladores de LLA que están desilusionados”, confirmaron, augurando una sangría que podría debilitar aún más al oficialismo.
Un golpe demoledor en el recinto
Con 6 miembros en su haber y la posibilidad de crecer, el nuevo bloque se convierte en una pieza clave para la oposición. Ya demostraron su poder en votaciones recientes, sumando sus votos para rechazar vetos presidenciales a leyes clave como la de Emergencia en Discapacidad y la de Financiamiento Universitario.
El dato no es menor: estos 6 diputados serán cruciales para que la oposición consiga quórum y avance con su agenda, dejando a La Libertad Avanza en una posición mucho más vulnerable. Su próxima batalla será el debate del Presupuesto 2026, donde se espera que su voto sea decisivo.
La conformación de “Desarrollo y Coherencia” deja en evidencia el desgaste y las profundas divisiones internas del oficialismo, que ahora enfrenta una nueva guerra en el Congreso, declarada por sus propios exaliados.