El narcotraficante mexicano está dispuesto a declararse culpable si es extraditado a EE.UU, a cambio de una “pena razonable” y de ser recluido en una prisión de mediana seguridad.
En declaraciones a Radio Fórmula de la ciudad de México, el abogado José Refugio Rodríguez reveló que habló de esa opción con Guzmán hace 10 días, y que al capo narco -recluido en la prisión del Altiplano- le pareció aceptable.
El objetivo sería negociar en Estados Unidos “una pena que no estuviera elevada, una pena razonable”, y su reclusión en “una prisión de mediana seguridad que no tuviera las condiciones en las que está aquí en México”, indicó Rodríguez.
El letrado apuntó que el Chapo le pidió hace ya tiempo que buscara un profesional para que lo representara en Estados Unidos, por lo que contactó a William Stuttgart, con quien tiene relación desde mayo de 2014.
“Con él es con quien hemos visto que, de ir a un juicio a Estados Unidos, habría que negociar”, explicó Rodríguez, convencido de que la estrategia no será pelear en los tribunales sino buscar mejores condiciones para su cliente
Sobre las actuales condiciones de reclusión, dijo que el hecho de que Guzmán se haya fugado de dos penales de máxima seguridad no justificaba las extremas medidas que se están tomando en el Altiplano, que, advirtió, ponen en riesgo su salud.
Esta semana el secretario mexicano de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, había asegurado que el Chapo es tratado “como lo que es, un delincuente y está con medidas de seguridad para evitar una posible fuga”, y rechazado la existencia de “malos tratos”.
Guzmán denunció en un escrito ante el juez, difundido por medios mexicanos, que las autoridades de la prisión lo están “torturando” con interrupciones al sueño cada cuatro horas para pasar lista y que eso afectó su salud.
Rodríguez pidió este jueves al ministro que le muestre la sentencia condenatoria en contra de su cliente para que pueda decir que “es un delincuente”.
Además, se quejó de que no se permita a la pareja de Guzmán, Emma Coronel visitarlo en la prisión, pese a que ella presentó un documento que demuestra que es su concubina, lo que supone “una violación”.
Las fuerzas federales mexicanas detuvieron al líder del cártel de Sinaloa el 8 de enero último en la ciudad de Los Mochis, en el noroeste del país, seis meses después de su fuga del penal del Altiplano, ubicado en el central Estado de México, y apenas dos días después empezó a hablarse de la chance de entregar al Chapo a EEUU, que formalizó a través de Interpol dos órdenes de arresto.
Guzmán enfrenta decenas de cargos por narcotráfico y lavado de dinero en tribunales federales de Arizona, Texas, California, Illinois, Florida y Nueva York.
